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Estampillas
CUERPO DE BOMBEROS DE LOS ANGELES

 
PEDRO GODOY PARDO, 1a COMPAÑIA, +04/03/1969

Eran más de las 20:00 horas de esa oscura noche del día 4 de Marzo de 1969. La sirena había sonado poco antes y rápidamente los voluntarios, que en esos momentos regresaban a sus hogares después de una jornada más de trabajo cotidiano, corrieron hacia los carros y al llamado. Se trataba de extinguir las llamas que surgían de unas zarzas en la Avda. Sor Vicenta, en la entrada norte de la ciudad de Loa Angeles. 

En la oscuridad, con sorpresa, un auto particular imprudentemente trató de entrar a la ciudad. Pero dejó en la calzada, atropellado, a un joven angelino. Pedro Godoy Pardo (Q.E.P.D) casado y con hijos, familia que ofrendó su dolor a la comunidad, porque ese padre muerto no perdió la vida material sin sentido. Su partida le dio una nueva vida espiritual que hoy y siempre seguirá iluminando la senda de servicio, que están cumpliendo todos los Bomberos Voluntarios de esta patria chilena. 

Esa calurosa noche del 4 de Marzo de 1969 lo fue más con el calor de las llamas. Ese calor ahora se siente en el afecto y estima que cada voluntario antiguo y aspirante siente por Pedro Godoy Pardo. Su vida la perdió poco después de la media noche de aquel aciago día en que fue atropellado junto al carro bomba del cual era maquinista. 

Su holocausto reafirma aquel compromiso pronunciado voluntariamente: POR HONOR Y FE DE BOMBERO, ENTREGAR LA VIDA SI FUESE NECESARIO. En Pedro Godoy Pardo esta frase no es una banalidad, sino una realidad. 
Su vida ofrendada por la seguridad de las personas y los vienes de los demás está siempre presente el espíritu de todo el Cuerpo de Bomberos de Los Angeles, y con mayor fuerza, en su primera Compañía, en la cual formaba parte. 

Su efigie ocupa hoy un lugar destacado en la Sala de Sesiones de la Primera Compañía. Sus restos mortales descansan en el Mausoleo de la Institución en el Cementerio General de la ciudad. Su memoria se recuerda con un monolito ubicado en el centro de la Plaza que lleva su nombre ubicada en el sector poniente de Los Angeles y que hoy luce remozada, gracias a un proyecto de la Municipalidad. Pero, en realidad, Pedro Godoy Pardo está en espíritu en todas estas partes y, más aún, en el corazón y la mente de cada angelino, sea voluntario o no, que reconoce en él su sacrificio, fruto del desinterés y del anhelo de prestar servicio a la ciudadanía. Los Angeles rinde y seguirá rindiendo homenaje a este joven ejemplo para futuras generaciones. 
 

Información aportada por la nieta ,Voluntaria Linda Godoy de la Primera Compañía de los Angeles

LUIS ZAVALA SANDOVAL. 4a COMPAÑIA, +14/01/2004

La madrugada del miércoles 14 de enero de 2004, Luis Zavala Sandoval (46 años), miembro de la Cuarta Compañía del Cuerpo de Bomberos de Los Angeles, acudió a un llamado para prestar apoyo en la extinción de un incendio en el sector de Rinconada de Huaqui, en el sector Millantú, Octava Región.
En el trayecto, cuando el carro Bomba se aprestaba a llegar al lugar del siniestro, un paro cardiaco acabó con la vida del Voluntario.

Con siete años de labor bomberil, para el maestro carpintero Luis Zavala, la institución era su prioridad, por eso a pesar de estar advertido de una dolencia cardíaca, no dudó en asistir a combatir. "Su corazón lo traicionó, porque el tenía un corazón demasiado grande por su prójimo", comentó su madre, María Sandoval Sanhueza. "Era un buen padre, un buen hijo, hermano y un buen vecino", agregó, en medio de la tristeza y el dolor de su partida y orgullosa a la vez, de que su muerte haya sido por ayudar a los demás.

Luis Zavala Sandoval , estaba casado y tenía dos hijos.